Un blog en el que tan a menudo escribo de género negro estaría incompleto si no contara con la presencia, de vez en cuando, de una buena femme fatale que llevarse a los ojos. O de otras mujeres que, sin encajar estrictamente en esa etiqueta, sí son vitales en la historia del mejor cine negro.
No pretendo puntuarlas, para mí son todas de 10.
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Biografía
Bettejane Greer, más conocida como Jane Greer, nació en Washington D.C el 9 de septiembre de 1924.
Modelo en su adolescencia, su inicio en el mundo del espectáculo se produjo como cantante de una banda, hasta que Howard Hughes vio una foto suya en la portada de un número de la revista Life y la envió a la productora RKO, obteniendo papeles como actriz en películas como Dick Tracy, detective (Dick Tracy, 1945), Retorno al pasado (Out of the Past, 1947) o El gran robo (The Big Steal, 1949), estas dos últimas con Robert Mitchum como protagonista masculino.
Tras dos años de parón, retomó su carrera en los cincuenta, interviniendo en películas como El prisionero de Zenda (1952), Huida hacia el sol (1956) o El hombre de las mil caras (1957).
Ya en los ochenta participó en Against All Ods, versión de Out of the Past y en una parodia televisiva basada en la misma película que se emitió en el programa Saturday Night Live.
De su paso por televisión, una serie inolvidable, Twin Peaks, en la que interpretó el papel de Vivien Niles, madre de Norma Jennings (Peggy Lipton), la propietaria del Double R Dinner y amiga de la infancia de Laura Palmer.
Jane Greer falleció de cáncer a los 76 años en Los Ángeles, California.
En mi retina
Pues para no haber hecho nunca de mala malísima, Jane Greer convertida en Kathie Moffett por obra y gracia del director Jacques Tourner compone una femme fatale de manual. Aún diría más: una de las más malas malísimas, maquiavélicas y retorcidas que ha dado la historia.
Acapulco. Jeff Bailey (Robert Mitchum), detective privado que recibe de Fred Sterling (Kirk Douglas comenzando a ser maloso en el cine) el encargo de localizar a la mujer -bellísima, no podía ser de otro modo- que ha tratado de asesinarle.
Kathie, que como Greer fue cantante, en este caso en un club de jazz de Nueva York y antes de emigrar a las cálidas tierras mexicanas.
Flashbacks, sensualidad, romanticismo, sombras, mentiras, la inocencia encarnada por la actual novia de Bailey -Ann, Virginia Huston- enfrentada a la perversidad representada por Kathie Moffett.
Tabaco y alcohol corriendo a raudales por casi cada uno de los fotogramas de una de las mejores películas del género, la que contiene sin duda todos los elementos que lo caracterizan, sus sombras amenazantes, las situaciones más sugeridas que mostradas, su trama un tanto enrevesada, la tipificación de sus personajes, el antihéroe desengañado…
Y, como decía, la expresión perfecta del concepto femme fatale, la mujer atractiva, irresistible, por la que un hombre desengañado y harto haría lo que fuera aun después de conocer su verdadera y peligrosa personalidad.
Si no la has visto…
Hola Ricardo, acabo de descubrir tu blog y estoy seguro de que lo seguiré a menudo… A mí también me encantan las malas malísimas del cine clásico… Por cierto, y aunque en otro registro, ¿qué te parece la Regina Giddens de Bette Davis en ‘The Little Foxes’? Yo también acabo de crear mi propio blog de cine, te invito a visitarlo y a darme tus sugerencias y comentarios. Sé indulgente, aún no sé bien cómo funciona esto, ¡pero ahí voy! ¡Ah! ¡Y enhorabuena por el tuyo!
trabelindoencineopia.blogspot.com
Hola, Jordi, entono un mea culpa y confieso que no he visto (o no recuerdo haber visto) esa película de Bette Davis, tomo nota y trataré de enmendar el error. En cuanto a tu blog, lo miraré a fondo pero tiene muy buena pinta, desde luego (quizás yo no alinearía las imágenes, o no todas, a izquierda o derecha sino que las centraría, al menos las que tuvieran un ancho razonable, pero es solo una cuestión de gustos).
Veo que estás en G+ (y que me tenías en tus círculos), acabo de añadirte al mío dedicado al cine y fotografía.
Nos leemos.
Ahhh! Yo me dejaría matar por Jane Greer. Tal vez eso es lo que mejor defina a una Femme fatale: que su víctima piense: «es muy mala, pero es tan guapa que merece la pena el riesgo».