Libros de saldo: Jerry Cotton

Advertencia: no busques a Jerry Cotton entre los autores más publicados del universo mundo. Es más, ni siquiera le busques entre los autores, sin más, pues Jerry no es persona sino personaje, en concreto un agente del FBI protagonista de decenas o incluso cientos de casos escritos originalmente en alemán y con unos cuantos autores detrás, hasta diez si nos tenemos que fiar de lo que dice la Wikipedia.

Protagonista también de algunas películas igualmente alemanas, en casa está presente con este libro publicado por Ediciones G. P. en 1965. Y, para que conste, dejo aquí la portada.

Cuatro obras policiacas. Jerry Cotton. Ediciones G. P., 1965

 

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Libros de saldo: James M. Cain

Entre los libros de saldo que ocupan un lugar preferente en mi librería criminal, hay varios repetidos -mismos títulos en diferentes editoriales-, algunos incluso por partida triple.

El de hoy está dos veces, muy apropiado teniendo en cuenta que esta novela de James M. Cain fue adaptada por Billy Wilder y Raymond Chandler (dos, también) para convertirla en una de mis películas favoritas de género negro: Double Indemnity, con Fred MacMurray, Barbara Stanwyck y Edward G. Robinson como trío protagonista.

Me refiero a Pacto de sangre, por supuesto.

Uno de los ejemplares que tengo no es muy antiguo, la verdad: colección Libro Amigo de Bruguera, año 1981.

El otro, una joyita que a pocos permito tocar: colección El Séptimo Círculo, editorial Emecé (Argentina, 1945).

Ésta, evidentemente, es la portada que dejo aquí lleno de orgullo y satisfacción.

Pacto de sangre. James M. Cain. Colección El Séptimo Círculo, Ed. Emecé Argentina, 1945

 

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Libros de saldo: Ian Fleming

Nunca me he considerado un tipo bondiano, lo que equivale a ser, sin más, flemingiano. No: Bond, James Bond, no es mi tipo, nunca me ha hecho tilín ni siquiera en sus películas, algunas de las cuales he visto con interés y me lo han hecho pasar bien, pero nada más.

Quizás me atraiga algo más la personalidad de su creador, Ian Fleming, espía al servicio de Su Majestad (o algo parecido) antes que escritor de novelas de agentes secretos, periodista, bibliófilo y, por supuesto, autor de doce novelas y nueve cuentos protagonizados por el señor 007.

Pero a pesar de no ser seguidor suyo, sí debía estar en mi biblioteca criminal, representado por tres de sus novelas, una en el estilo deliciosamente pulp de Club del Misterio y dos auténticos saldos encontrados en rastrillos o librerías de segunda mano.

Dejo aquí, claro está, las tres portadas en cuestión. Dejo también, a modo de cierre: Ian Fleming no solo escribió novelas de espías, también es el autor de una cosita infantil que tal vez hayas visto en el cine o en la tele: Chitty Chitty Bang Bang.

 

 

 

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Libros de saldo: El caso del marroquí enamorado

Una de mis librerías de guardia a la hora de encontrar libros de saldo que pasen a engrosar mi colección de antiguallas es la Hermanos Vidal de Zaragoza, junto a la plaza de san Francisco y el campus universitario. Allí puede uno pasarse horas rebuscando entre estantes y cajones con la seguridad de que algo interesante terminará encontrando. Allí trato de completar colecciones o conseguir los títulos que me pueden faltar de un autor concreto.

Allí huele a papel viejo, ese aroma que para muchos lectores es el más exquisito de los perfumes.

Y allí encontré, un buen día, esta transcripción novelada de diferentes procesos cuyas vistas habían tenido lugar en los Tribunales de Justicia y que, posteriormente, habían sido escenificados por el cuadro de actores de Radio Zaragoza desde finales de los cincuenta.

Editaba El Noticiero, periódico fundado en junio de 1901 (para más información puede consultarse la Gran Enciclopedia Aragonesa) y desaparecido en 1977. Firmaba un tal Manuel García Suárez, que le ponía por título El caso del marroquí enamorado.

Por supuesto, el marroquí enamorado se vino para mi casa y allí está alojado desde hace unos cuantos años, tantos que ya ha conseguido incluso el permiso de residencia.

El caso del marroquí enamorado. Manuel García Suárez. T.E. El Noticiero‎ 1964

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Libros de saldo: Clifford Witting

Voy hoy, rebuscando en mi biblioteca criminal, con una de las novelas más antiguas que conservo -año 1945- y de uno de los autores más difíciles de encontrar en España. De hecho, apenas se encuentra algo en nuestro idioma en internet y, para la “sabelotodo” base de datos del ISBN ni siquiera existe (o yo no lo he sabido localizar).

Se trata de Clifford Witting (1907-1968), escritor inglés responsable de 16 novelas policiales escritas entre 1937 y 1964, casi todas ellas protagonizadas por los inspectores Peter Bradford y Harry Charlton.

Solo he leído la que muestro aquí, editada en la colección El Séptimo Círculo de Emecé (es decir, con la garantía Borges-Bioy Casares) y encontrada, como tantos otros libros de saldo de mi colección, en un puesto callejero-playero.

Lectura veraniega, como el título, como muchas de las novelas de la época y con una inteligente ironía en el autor-protagonistas como nota destacable.

«Asesinato en pleno verano». Clifford Witting. Colección El Séptimo Círculo, Ed. Emecé Argentina, 1945

 

 

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Libros de saldo: Hubert Monteilhet

Hubert Monteilhet, nacido en París en 1928, profesor en varios colegios franceses de Túnez durante diez años, escritor de un buen número de novelas de género histórico, actualmente crítico gastronómico para el diario Sud Ouest y, por la parte que nos toca, autor de una treintena de novelas de género policíaco.

Con la primera de ellas, Las mantis religiosas (1960), consiguió el Grand prix de la littérature policière. La tengo en casa, acumulando polvo, en edición de 1964. Aquí, como siempre, la portada.

«Las mantis religiosas». Hubert Monteilhet. Ediciones G. P. 1964

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Libros de saldo: Rex Stout

Rex Todhunter Stout, escritor estadounidense reconocido, obviamente, por ser el creador de Nero Wolfe, protagonista de 48 novelas en una serie que fue nominada como Mejor Serie de Misterio del Siglo en 2000.

Obeso, tacaño, mal genio, bebedor compulsivo de cerveza, criador de orquídeas, asistido permanentemente por Archie Goodwin pues apenas sale de casa y alimentado por el cocinero Fritz, Wolfe resuelve los casos desde su despacho después de recopilar la información que le va proporcionando su ayudante o sus clientes, en ocasiones mientras parece dormitar en su butaca preferida.

Nero Wolfe nace para la literatura en 1934 y muere en 1985 -diez años después del fallecimiento de Stout- con la publicación a título póstumo de Death Times Three.

Cinco de esas 48 novelas acumulan polvo en las estanterías de mi casa. Una, repetida y con una reciente reedición por parte de Navona: Sonó el timbre (anteriormente, Cuando suena el timbre, en Club del Misterio de Bruguera).

Como acostumbro, dejo aquí las portadas de varias de ellas.

No estaba bastante muerta. Rex Stout. Molino Selecciones de Biblioteca Oro, 1959

La madre cazadora / Gambito. Rex Stout. Ediciones G. P., 1967

Antes de medianoche. Rex Stout. Bruguera Club del Misterio 1983

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Libros de saldo: Richard Ellington

Poco se sabe de Richard Ellington buscando en san Google que todo lo ve, simplemente que se trata de un escritor norteamericano nacido en 1914 y fallecido en 1980, autor de tan solo cinco novelas policíacas y algunos relatos cortos publicados en revistas como Manhunt o Mike Shayne Mistery Magazine, todas ellas protagonizadas por el detective y ex actor Steve Drake, duro, cínico, mujeriego y todos los tipismos que acompañan al género -o lo acompañaron en determinada época- que puedas imaginar.

Y esto último lo digo yo, no san Google, después de leer las dos únicas novelas que de Ellington pude encontrar en algún rastrillo playero uno de esos veranos en que has hecho corto con las provisiones literarias cargadas en la maleta y algo hay que llevarse a los ojos. Y si de vez en cuando no comes solomillo sino hamburguesa, pues tampoco pasa nada. Yo pasé un par de buenas tardes con ellas, que es de lo que se trata en ocasiones, sobre todo cuando el sol y el calor aprietan y la cabeza no da para más.

Como siempre, dejo aquí ambas portadas.

Crimen entre artistas. Richard Ellington. Editorial Planeta Crime Club 1954

Habitación 510. Richard Ellington. Editorial Planeta Colección El Buho 1953

Libros de saldo: John Dickson Carr

John Dickson Carr, o Carter Dickson, o Carr Dickson -la verdad es que tampoco se mataba buscando seudónimos- o Roger Fairbairn -en un esfuerzo de originalidad-, escritor estadounidense de la escuela más británica en lo que respecta a sus novelas detectivescas, muchas de ellas protagonizadas por el obeso doctor Gideon Fell, presuntamente inspirado en el británico G. K. Chesterton, padre literario del padre Brown.

Habitaciones cerradas, crímenes en apariencia paranormales, campiña inglesa… Novelas francamente entretenidas de las cuales hay por casa unas cuantas, dos o tres de ellas en la colección Club del Misterio editada por Bruguera en los ochenta y otras dos mucho más antiguas, de las más antiguas que conservo en mi particular colección criminal: Los anteojos negros -ejemplar de 1945, en la mítica colección argentina El Séptimo Círculo– y Anda de noche, de 1949 y editada o distribuida por la memorable Editoral Calleja -sí, la de los cuentos- en la colección El elefante blanco.

Dejo aquí las portadas de ambas.

John Dickson Carr. Ed. El elefante blanco (distribuido por Ed. Saturnino Calleja) 1949

Los anteojos negros. John D. Carr. Colección El Séptimo Círculo, Ed. Emecé Argentina, 1945

Libros de saldo: Georges Simenon

Decía días atrás, en esta otra entrada dedicada a los libros de saldo presentes en mi particular biblioteca criminal, que el escritor más repetido en ella era el insuperable Georges Simenon, autor de un total de 103 títulos (75 novelas y 28 relatos) protagonizados por Jules Maigret, de los cuales 68 llevan años criando polvo en mis estanterías.

Prácticamente todos ellos comprados en mercadillos callejeros, en paseos marítimos de diferentes localidades, en rastrillos benéficos… Casi todos en castellano pero con algunas excepciones compradas (y leídas) en su idioma original. Con un buen número de editoriales y colecciones representadas: Forum, Planeta, Bruguera, Tusquets, Luis de Caralt, Aymá…